PALABRAS QUE BESAN: la muerte del amor

El poeta

Nace en Ibarra- Ecuador, en el eclipse del 26 de febrero de 1956, a las 6 y 10 de la mañana. Su signo zodiacal piscis. Su vida se desarrolla incorporando todos estos conocimientos absorbidos por medio de la búsqueda de la verdad, a través de la creencia que el ser humano es el centro de la realidad. Tiende a destruir definitivamente todos los mecanismos racionalistas y sofistas, y a sustituirlos por la verdad como fuente de solución de los principales problemas de la vida interior del hombre para luego ponerle en práctica en su vida externa. Sus fuentes son el conocimiento adquirido por sus Maestros, los estudio catedráticos, las enseñanzas masónicas, y lo aprendido en la escuela de la vida. Cree en la armonización de los dos estados, aparentemente tan contradictorios, que son el sueño y la realidad, de allí extrae todo lo que el inconsciente puede aportar y expresarlo sin ningún tipo de mediación para trasladarle a lo mágico, y misterioso, induciéndole a creer que en el espíritu humano existe un cierto punto que une la vida y la muerte, lo real y lo imaginario, el pasado y el futuro, lo comunicable y lo incomunicable, lo alto y lo bajo, dejan de ser vistos como contradicciones para ser complementarios en la transformación humana a través del equilibrio. Toda esta comunión de ideas y experiencias tienen su fin conocer la verdad más profunda de las cosas, por qué son lo que son; y, aún más, por qué son.

En sus obras poéticas, en sus tratado y ensayos metafísicos y humanistas plantea la necesidad de establecer relaciones simples, del humano con el humano, pretendiendo la eliminación del sufrimiento y dando sentido a la vida en procura de la felicidad basada en el amor, desarrollando la compasión y la construcción de una paz interior que se expanda al exterior y resuene en los pasillos del universo.

Su poesía audaz y hermética es un dictado del corazón a través del pensamiento, sin la intervención reguladora de la razón, ajeno a toda preocupación estética o moral. Por ende refleja sensualidad que acaricia, con sus versos hace un homenaje a la mujer, recorriendo con luz ardiente sus delicias y su alma. Reviste cada poema con nácar dorado de palabras donde el amor y la pasión se abrazan con la vida capaz de crear un lenguaje poético donde predominan imágenes de gran plasticidad. Estas metáforas e imágenes van a influir en toda su poesía.

De principios agnósticos porque respeta la creencia por ser un asunto individual de las personas, en tanto que no forme parte esencial de la condición humana, aunque sí lo sea de la cultura y de la historia humana. Cree que quienes profesan el agnosticismo no son necesariamente antirreligiosos, pero sienten respeto de todas las creencias que proceden de una reflexión individual y honesta, y no de un interés egoísta de poder, de la desesperación o de la presión del entorno. Los agnósticos entienden la fe sólo como una opción personal de cada individuo que no se comparte.

Libre Pensador e Iconoclasta de la vida, que siente que los caminos a recorrer en la búsqueda de la verdad son infinitos para derribar mitos y figuras desde los pedestales. Sin embargo reconoce tener dos actitudes en su búsqueda, la primera es que a veces sabe desde donde partir, pero no se tiene una meta prefijada. Y otras veces tiene un lugar desde donde iniciar el recorrido, cree conocer el camino - marcha con seguridad- y sabe que la meta está ahí, una vez que alcanza el conocimiento, lo descubre y lo regala en sus escritos.

Transformador en sus ideas. Su tarea es transmitir lo que sabe, a fin de que se produzca en las personas un cambio en la manera de pensar y así desarrollar una nueva actitud en el transitar por esta vida terrestre, enfocándose siempre en la vigorosa búsqueda de la felicidad que inunde nuestros espíritus.

Si deseas comunicarte lo puedes hacer escribiendo a la siguiente dirección electrónica:

maestroiluminado@hotmail.com

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